CANCÚN, 28 de mayo.-
“La desocupación laboral cayó de 3.8 a 3.6 por ciento, colocándose como una de las cifras más bajas de los últimos años. El porcentaje mínimo histórico de la presente administración fue en mayo de 2012 con 3.56%”, destacó Patricio de la Peña Ruiz de Chávez, secretario del Trabajo y Previsión Social de Quintana Roo, con referencia al informe mensual del Instituto Nacional de Estadística y Geografía difundido este jueves 28 de mayo.
El secretario enfatizó que se debe a oportunas estrategias dispuestas por el gobernador Roberto Borge Angulo, entre las que resaltan: el impulso de la formalidad laboral, el fomento al autoempleo, más oportunidades para personas con discapacidad y de la tercera edad, a cursos, capacitaciones y becas, con las que se mantiene una tasa muy por debajo de la media nacional por cuarto mes consecutivo, fijada este mes en 4.3%.
Esto nos confirma -sostuvo- como uno de los líderes en el país en la generación de empleos, gracias a la promoción turística y a las inversiones tanto en el norte como en el sur por ser un Estado seguro, lo cual representa crecimiento económico, reflejado hoy en más y mejores empleos.
“Es importante subrayar que en esta época la mayoría de las series económicas se veían afectadas por factores estacionales; sin embargo, la llamada ‘temporada baja’ quedó atrás debido a un plan permanente para contrarrestar los efectos, lo cual ha sido uno de los mayores aciertos en materia laboral de esta administración”, ponderó De la Peña.
De acuerdo con los resultados de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo, las cifras durante el primer trimestre de 2015 reportaron que la población económicamente activa del Estado se ubicó en 749 mil 808 personas, que significaron 66.3% de la población de 15 años y más.
Del total de ocupados, el 68.1% opera como trabajador subordinado y remunerado ocupando una plaza o puesto de trabajo, 21.9% trabaja de manera independiente o por su cuenta sin contratar empleados, 5.7% se desempeña en los negocios o en las parcelas familiares, contribuyendo de manera directa a los procesos productivos pero sin un acuerdo de remuneración monetaria, y finalmente un 4.3% son patrones o empleadores.
