Tiro Libre
Anwar Moguel
Novedades Chetumal
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Con la mira puesta en la ya no tan lejana sucesión gubernamental de 2022, los líderes de las facciones locales de Morena están metidos de lleno en el jaloneo por las candidaturas disponibles en este 2019 para las diputaciones locales tratando de colocar a sus peones y alfiles sobre el tablero con la finalidad de abrirse camino rumbo a la silla tan anhelada que hoy ocupa Carlos Joaquín González.
Morena, que recién oficializó la alianza con su partido rémora, el PT, y con los “fifís” del Verde Ecologista, se mantiene como amplio favorito para ganar la mayoría de las curules disponibles a pesar del desgaste sufrido en sus primeros meses como gobierno, sobre todo a nivel municipal.
Por esa razón los adelantados morenistas entre ellos los senadores Marybel Villegas y José Luis Pech, y el diputado federal Luis Alegre, han empezado con un intenso reclutamiento de “figuras” propias y extrañas para su causa con la finalidad de convertirlos en candidatos.
En la capital, la disputa por las dos candidaturas disponibles está candente, aunque cada vez cobra más fuerza el rumor de que dos jóvenes hasta hace unos meses priistas, “Tino” Ruiz y Alejandro Alamilla, podrían ser los abanderados del partido guinda pese a que no fueron cuadros de peso ni siquiera en su ex partido.
Dentro de las nuevas adquisiciones de Morena también estaría la actual regidora “independiente” María Hadad Castillo, pero aún no se ha oficializado su arribo al ejército lopezobradorista en Quintana Roo.
Estos y otros reclutamientos han desplazado a los fundadores de Morena en el estado, que fueron quienes se partieron el lomo desde el principio para obtener el registro del partido, personajes que hoy se sienten traicionados por sus líderes y dirigentes.
Tal es el caso del ex regidor chetumaleño, Laurentino Estrella Chan, maestro jubilado que se la jugó con Morena en los tiempos de escasez y que pese a que realizó un trabajo más que aceptable en el pasado cabildo capitalino, no fue considerado para ninguna posición en el actual gobierno municipal.
Despreciado por las figuras de la comarca chetumaleña, fue el cancunense Luis Alegre Salazar quien volteó a ver al banqueado Laurentino, fichándolo en su equipo y abriéndole la posibilidad real de convertirse en candidato a diputado, lo cual por su trayectoria y trabajo partidista sería más que merecido.
El movimiento de Luis Alegre es clarísimo: está decidido a fortalecer su estructura en el sur de la entidad, para lo cual también integró a sus huestes al todavía perredista Andrés Blanco Cruz, con quien Laurentino hizo buena mancuerna en el cabildo chetumaleño.
